Abstract: Los conductistas radicales cometen la falacia conocida como “argumento desde la definición”, un argumento cuya conclusión depende de la definición de ciertos términos clave. Este tipo de argumento es falaz porque las definiciones son baratas, por retóricas. Ejemplos notables de esta falacia en el conductismo radical son los tratamientos de las teorías, la cognición y los eventos privados. Los conductistas radicales han argüido que el análisis conductual es teórico sobre la base de la re-definición skinneriana de “teoría” como “ley empírica formalizada”. También, han argüido que el conductismo radical no niega la cognición, sobre la base de una re-definición conductual de “cognición”. Igualmente, han argüido que el conductismo radical captura los eventos privados sobre la base de una re-definición de “evento privado” como “conducta”. Si tales re-definiciones no son retóricas, entonces representan aseveraciones esencialistas sin fundamento. Por supuesto, lo mismo se aplica a las definiciones que se encuentran en el cognitivismo. |